País: Italia – 2001
Género: Dramático
Duración: 100 minutos
Intérpretes: Toni Servillo, Andrea Renzi, Nello Mascia
Ninni Bruschetta, Angela Goodwin
Guión: Paolo Sorrentino
Fotografía: Pasquale Mari
Montaje: Giogiò Franchini
Vestuario: Silvia Nebiolo
Música: Pasquale Catalano
Hace unos días comentaba que tras ver otra película de Paolo Sorrentino, Le conseguenze dell´amore, tenía ganas de ver la que había supuesto su debút en el mundo de la dirección. Un debút por la puerta grande, puesto que con esta película, gano cinco premios David di Donatello, que vienen a ser como los Goya Españoles; mejor director, guión, y película entre otros.
La historia se inicia en los años 80, en tierras Napolitanas, en donde vemos la caída sin red de dos hombres, los cuales comparten el mismo nombre, Antonio Pisapia. El primero es un jugador de fútbol, pasada la treintena, aclamado porque un gol suyo, permitirá a su equipo jugar la copa de la UEFA, el cual por no dejarse comprar y rechazar perder un partido, a cambio de una importante suma que haría más dulce su jubilación, sufre una agresión en el campo, por parte de sus compañeros de equipo, que lo postra en la cama, con una lesión de rodilla, y lo imposibilita para jugar al futbol.
Su sueño pasa entonces por hacerse un hueco como entrenador, para lo cual dedica muchas horas al asunto, planeando tácticas deportivas, entre ellas, (L´uomo in piú, que da título a la cinta), sin buscar otro oficio u ocupación al margen del fútbol, para desesperación de su mujer, la cual se tomará su venganza personal. Además Antonio carece del arrojo y determinación necesaria, esa falta de apasionamiento que le le echa en cara el directivo del Club.
La otra cara de la moneda, el otro Antonio Pisapia, Tony, es un afamado cantante de canción lígera, cincuentón, adicto a las mujeres, amante del sexo y las drogas, que echa por los suelos su carrera, cuando bajo sus sábanas se mete una chica de dieciséis años. Pasará de actúar ante miles de personas, a arrastrar sus huesos por pueblos recónditos, en verbenas, ante un público que se cuenta con los dedos de las manos.
Hay un momento en que estas dos almas gemelas, unidas en el fracaso, se ven, se miran y se reconocen, y es en ese final surrealista, cuando cada cual emprende su camino, caminos opuestos, mientra suena el I will survive, cuando la película da lo mejor de sí.
Extraordinaria es la labor interpretativa de Toni Servillo, y meritoria la de su alma gemela, Andrea Renzi, que habla con sus silencios y su mirada de impotencia, los dos, encarnando esos anti-heróes con los que es fácil conectar. Apuntar también la estupenda fotografía y recreación de la Italia de los 80 a cargo de Pasquale Mari
L´uomo in piú IMDB
Otra película de Paolo Sorrentino Le conseguenze dell´amore