En este último episodio, por supuesto, como el año pasado, hay cosas que quedan en el aire, a pesar de que la trama principal de las bombas ya se había resulto hace unos cuantos episodios, nada importante como para obligar a hacer una temporada más, pero suficiente para realizar más de una y con varios posibles frentes (ojo a los chinos).
Una vez acaba la serie, voy a indicar los puntos que a mi entender han destacado más, pero por abajo (y quizás me repita un poco):
– También, por tanto, las escenas de acción han disminuido, lo que hace que la serie tenga menos ritmo.
– A esto ha contribuido que la parte de la trama que ocurre en la Casa Blanca ha aumentado, y las escenas de despachos son un coñazo.
– Se nota mucho que en esta temporada Jack Bauer aparece mucho menos de otra. Antes todo el rato estaba él en pantalla, pero esta vez ha habido episodios en que nos hemos pasado muchos minutos sin ver a Bauer.
También ha sido la primera temporada que he visto en versión original y me ha llamado poderosamente la atención la voz de Bill Buchanan (James Morrison). El personaje gana muchísimo con su voz original y también este es uno de los personajes que más me han gustado.
Con esto dejaré de daros la tabarra con la serie, ya sólo queda esperar que Antena 3 se decida por emitir los capítulos a una hora y de una forma dignas, cosa que, sinceramente, dudo.
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