Director: John Carpenter
Guión: Bill Lancaster, basado en una historia corta de John W. Campbell Jr.
Reparto: Kurt Russell (MacReady), Wilford Brimley (Blair), T.K. Carter (Nauls), David Clennon (Palmer), Keith David (Childs), Richard Dysart (Dr. Cooper), Charles Hallahan (Norris), Richard Massur (Clark), Donald Moffat (Garry), Joel Polis (Fuchs), Peter Maloney (Bennings)
Productores: David Foster y Lawrence Turman para MCA/Universal y Turman-Foster Company
Fotografía: Dean Cundey
Música: Ennio Morricone
Efectos especiales: Rob Bottin (maquillajes), Jim Danforth (pinturas matte)
Montaje: Todd Ramsay
USA 1982
La primera imagen que vemos es la de una nave espacial, algo así como un platillo volante acercándose precipitadamente a la atmósfera. Vemos como entra en ella y ahí empieza la película. Eso nos puede dar una pista de a qué puede referirse el título con eso de “La Cosa”. Pero tranquilos, enseguida se sale de dudas.
Recuerda irremediablemente a otro excelente trabajo de ciencia ficción, Alien (1979). Al igual que en ella, aquí los miembros de una expedición atrapados esta vez en la nieve, han de hacer frente a una criatura que desconocen y se los va cargando uno a uno al mismo tiempo que ellos intentan adivinar qué es a lo que se están enfrentando. También tiene algunas escenas con un toque gore, que sirva de aviso a estómagos delicados (como del que salía el Alien).
La cámara se recrea en los detalles y los hechos se muestran con pausa, logrando los silencios decir mucho más que los diálogos, que son en general bastante instrascendentes. Podrías ver una versión doblada al chino y enterarte de la trama, debido a que la principal fuerza reside en las imágenes y en las acciones, más que en las palabras.
La película es oscura y lenta, pero mantiene el suspense con la cosa del bicho y la desconfianza entre los ocupantes de la base antártica y como acabar con la dichosa cosa.
Por cierto, no confundir a esta cosa con La Cosa de Los 4 Fantásticos, que no tiene nada que ver, ni con el increíble Hulk, que era La Masa.
El director es John Carpenter, todo un experto en el género fantástico/humano (recordemos La Niebla, cuyo reciente remake se comentó hace un tiempo) y está protagonizado por su actor preferido, Kurt Russell. Las condiciones del rodaje fueron bastante duras, tanto que al director le generaron un cáncer de piel, por lo que desde entonces luce un rostro demacrado.
La cosa fue una nueva adaptacion del relato de John W.Campbell Jr. ¿Quién anda ahí? (Who Goes There?), en el que se inspiraron Howard Hawks y Christian Nyby para El enigma… de otro mundo (1951). El video de los Noruegos son en realidad escenas de esta película y el título inicial es copia del de la versión original. Se cuenta también que antes de este a Carpenter le llegó un proyecto que rechazó, cuyo protagonista era también un extraterre, pero con mejor carácter: E.T.
Otra curiosidad es el fracaso total en la taquilla en el momento de su estreno (lo que la ha convertido, como suele pasar, en película de culto). Se dice que una de las causas es que no aparece una sola mujer en todo el film. En realidad según Carpenter había una (sin contar la voz de una máquina, femenina y grabada por la mujer de Carpenter, Adrienne Barbeau), pero debido a su embarazo tuvo que ser sustituida por un hombre.
La película forma parte de la “trilogía apocalíptica” junto a El Príncipe de las Tinieblas (1987) y En la Boca del Miedo (1995).