Hace ya algunas semanas escribí las primeras impresiones de Héroes, lo que esperaba fuera una estupenda serie, ya que estaba teniendo bastante éxito.
Desde entonces la he seguido viendo y he decir que no me ha defraudado, ha estado a la altura de lo esperado y es una gran serie. Esperemos que alguna cadena nacional se anime a emitirla, porque merece la pena.
Habiendo visto más de la mitad de la serie, creo que Héroes puede gustar a algunos porque la vean muy fantástica y a otros porque la vean muy realista. Aunque esto pueda parecer que se contradice, no es así. La cosa es que los protagonistas tienen poderes sobrehumanos (supuestamente dados por algún cambio genético sin explicar del todo), pero la serie trata más sobre los sentimientos que esos poderes les provocan que sobre lo que pueden o dejar de hacer con ellos.
Todos estos personajes son muy atractivos, en todos los aspectos. El físico salta a la vista, es evidente en algunos casos, pero también lo son los poderes que tienen, ya que ahí creo que radica uno de sus éxitos: esta gente puede realizar las cosas con las que alguno siempre ha soñado: poder curarse a sí mismo, atravesar las paredes, hacerse invisible, volar, leer la mente,… son cosas típicas pero que a cualquiera le gustaría poder hacer. Sin embargo ellos que lo hacen se sienten bichos raros o por culpa de ellos no pueden superar otros problemas, o son esos propios poderes los que les superan a ellos mismos.
Estos personajes además están muy bien dibujados a nivel personal. Sabemos muy bien lo que piensan y tienen coherencia absoluta entre su forma de actuar y el dibujo que se nos va haciendo de ellos, lo que consigue que empaticemos con ellos, que no identifiquemos a las primeras de cambio. Además se nos cuenta exactamente los datos necesarios para el desarrollo de la historia , no sabemos si cuando tenía 20 años le dejó un novio a una de las chicas o qué carrera estudiaron si no son datos importantes para la serie, lo que hace que el personaje quede bien definido y que no nos metan “paja” para supuestamente definir psicológicamente al personaje, sus propios actos lo van enriqueciendo.
Sobre la serie en sí, el argumento no tiene nada de particular, tiene algunos flash-back muy puntuales (hay un extraño episodio en que sólo se habla del Sr. Bennet que está plagado de ellos), se dedica a meter nuevos personajes para aumentar el dramatismo y a ocultar datos al espectador en muchos momentos para mantener la atención. La tremenda explosión de la ciudad de Nueva York actúa como McGuffin, el leitmotif de la historia que todos han de evitar y hacia lo que convergen sin saber realmente qué importancia tiene.
Los personajes principales son 3: el más importante de todos es Claire Bennet (Hayden Panettiere), la animadora a la que tienen que salvar para salvar el mundo. Es el único personaje que sale en todos los episodios y está relacionada de una u otra forma con el resto de héroes. Su padre adoptivo, el Sr. Bennet pertenece a una extraña organización que persigue a los héroes, no sabemos si con buenas o malas intenciones. Ella intenta sobrevivir como una persona normal pero en su camino se cruzan todo tipo de personas, desde el malvado Sylar a los colegas de su padre, pasando por los hermanos Petrelli, que tendrán importancia en su vida también. Por otra parte, dados sus extraños poderes y sabiendo que es adoptada también intenta encontrar a sus padres biológicos. Su poder es la capacidad para regenerar, curarse completamente de cualquier cosa que le suceda a su cuerpo, y le suceden unas cuantas.
El segundo en importancia es Peter Petrelli (Milo Ventimiglia). Tiene la capacidad de “aprender la habilidades” del resto de héroes con los que se cruza. Por una parte mientras no controla estas cosas se ve superado por ello, pero poco a poco irá dándose cuenta de lo que le sucede y aprenderá también a controlarlo de alguna manera, sobre todo después de recibir el mensaje de “salva a la animadora, salva al mundo” y de su encuentro con Claire Bennet. También le ayudará en su tarea de controlar ese poder otro de los héroes Claude, el hombre invisible. Más que nada, tanto este como otros personajes, le ayudan porque creen que la explosión nuclear que destroza la ciudad de Nueva York es él el que la provoca, con lo que más le vale aprender a controlar su fuerza antes de que esta le domine a él y reviente la ciudad.
Como tercero en importancia podríamos decir que está Hiro Nakamura (Masi Oka). Es un japonés que puede cambiar el continuo espacio-temporal, en otras palabras, detener el tiempo, hacer que pase más lento o viajar hacia el pasado o el futuro. Es el más graciosos y más friki de todos los héroes. Para ejercer su poder tiene que cerrar los ojos y hacer fuerza, pero no lo controla demasiado bien y le pasan cosas curiosas. Va siempre con su amigo Ando Masashashi y cree tener una misión, que tiene que cumplir a rajatabla. Aunque da la impresión de ser un simple friki, hacia el medio de la serie se descubre que tiene alguna implicación más.
Entre los malos hay que destacar a Sylar, que la policía cree un asesino en serie, pero que en realidad lo que hace es cargarse a los héroes que va encontrando para rebanarles el cerebro y arrebatarles sus poderes. También está el misterioso Sr. Linderman, que es como Charlie, todo el mundo habla de él pero nunca aparece (al final sí lo hará). También están el Sr. Bennet y su misterioso compañero el Haitiano y su oscura organización, que no se sabe muy bien en todo momento qué es exactamente lo que hacen.
Seguiremos hablando de Héroes, porque la serie lo merece.
La serie es estupenda. La primera temporada es de infarto. Es verdad que todos trabajan muy bien, y aunque los primeros episodios son un tanto sosetes luego a medida que los personajes interactúan gana en emoción e intensidad, y crea adicción. Cierto que los personajes están bien perfilados y definidos, cuando menos los que más peso tienen en la historia. Los efectos especiales sin ser espectaculares son funcionales y van bien con la historia.