Titulo original: Cosa voglio di più PaÃs: Italia, Svizzera Año: 2009
Género: Drammatico Duración: 121′ Director: Silvio Soldini Elenco: Pierfrancesco Favino, Alba Rohrwacher, Giuseppe Battiston, Teresa Saponangelo, Fabio Troiano, Bindu De Stoppani, Monica Nappo, Tatiana Lepore Producción: Lumière & Company, Radiotelevisione Svizzera Italiana, Warner Bros. Pictures Company, Vega Film FotografÃa: Ramiro Civita Montaje: Carlotta Cristiani Música: Giovanni Venosta
Anna es una joven que mantiene una relación estable con su pareja, tiene un buen trabajo, amigos con los que salir por la noche y tomar unas copas. En resumen lleva una vida tranquila y relajada, pero de pronto en su horizonte vital aparece Domenico y su mundo estalla por los aires. Ambos siente una pasión recÃproca. Él está casado y tiene dos hijos. Los encuentros furtivos entre ellos son difÃciles pero al mismo tiempo excitantes.
El director muestra con gran habilidad lo difÃcil que es llevar una doble vida, buscar tiempos muertos en los que dejar de lado las obligaciones y responsabilidades familiares, para intepretar otro papel junto al amante. Si Domenico entiende su casa como un infierno, abrumado por los sollozos de su hijo más pequeño, en conflicto permanente con su bella mujer, al lado de Anna es otro hombre, renacido, descargado del peso de la familia, convertido en un amante devoto.
Los dos actores tanto Alba Rohrwacher (Anna) Pierfrancesco Favino (Domenico), están estupendo, y gracias a ellos la pelÃcula funciona, porque aparecen practicamente en cada plano, y son sus rostros, que explicitan a la perfección el maremoto emocional del que son objeto lo que ha conseguido emocionarme.
Al tiempo que ese pasión es conocida por los demás, es cuando toman parte las respectivas parejas, con la ilusión de que se trate simplemente de un capricho, de un antojo pasajero, de un fogonazo que se consuma tras los primeros polvos, cuando lo extraordinario comience a tomar visos de normalidad y difiera entonces muy poco de lo que son sus existencias actuales.
Rodada con la cámara al hombro en muchas escenas, dota a la pelÃcula de una mayor entidad dramática. Una pelÃcula atemporal que he disfrutado.