Dirección: Miguel Santesmases.
País: España.
Año: 2006.
Duración: 97 min.
Género: Drama.
Interpretación: Óscar Jaenada (Boris), Javier Pereira (Álex), Javier Ríos (Carlos), María Castro (Estela), Celia Freijeiro (Genoveva), Marta Larralde (Belén), Dani Méndez (Germán), Cristina Castaño (Elena), Adrián Aviador (Luis), Sara Casasnovas (Alicia).
Guión: Antón Casariego, Miguel Santesmases y Martín Casariego.
Producción: Gerardo Herrero y Pancho Casal.
Música: Mastretta.
Fotografía: Alfonso Parra.
Montaje: Berta Frías.
Dirección artística: Sandra Frantz.
Vestuario: Marta Anta.
Tres hermanos sin padre y una madre con la que no se hablan, un lugar de playa (Ferrol), mujeres, un verano que se acaba y nuevos horizontes para los tres. Carlos, el hermano mayor (Javier Ríos) es el que se las liga y está a punto de casarse con Belén (Marta Larralde), con la que se mudará a Madrid, si bien sigue acostándose con Genoveva (Celia Freijeiro) de la que está locamente enamorada. Boris (Óscar Jaenada) es el eterno ligón, el que se las lleva a la cama, y al que le surge la oportunidad de dejar su pueblo y poner tierra por medio, un océano nada menos e irse a vivir a Brasil y sentar así la cabeza y centrarse, dejando de lado sus noches de farra y la vida loca. El tercero es Álex (Javier Pereira) recién enamorado de Estela a la que conoce en un bar. Es el que se enamora de las mujeres y tiene la oportunidad de irse con una beca tres años a estudiar a Bostón.
Luego tiene lugar una accidente de coche y todo se derrumba trastocando sus planes. Pasan cinco años vuelven a reunirse y ya nada es igual. Se juntan los tres hermanos nuevamente para acudir al entierro de sus madre. Los días azules del título son ahora un cielo con nubarrones y amenaza de lluvia. La gente ya está casada, las cabezas asentadas, los dedos anillados, el deseo adormecido, la monotonía empapelando sus nichos conyugales. Ahora sus existencias son piezas de un puzzle oscurantista que no casan, o lo hacen forzadamente, juntando sus vidas por inercia, por tradición, por no defraudar, sin el menor atisbo de pasión o convencimiento en sus acciones. Vidas pues fracasadas y marcadas con el dedo del desánimo y la melancolía, atiborradas de desamores y desvelos, de accidentes de coche que pueblan sueños y alimentan las pesadillas. Quieros y no puedos que nos hacen olvidar lo que deseamos y agarrarnos a lo fácil, aquello que más a mano tenemos. Como el sentimiento de responsabilidad impele a asumir los errores de los otros.
Buenas interpretaciones del trío protagonista masculino y femenino (Marta Larralde y Celia Freijeiro habían compartido escenario con la obra teatral El color de agosto donde ambas se desnudaban) Diálogos con mucha sorna y un barniz de tristeza implícito impreso en el ADN de los protagonistas marcado por la tragedia que luchan para aliviar la carga de sus pecados y experimentar la catarsis que les permita renacer de nuevo sin miedo a nada. Asumir el pasado y digerirlo es la clave para poder mirar el futuro con esperanza.
Días Azules es un interesante drama de adultos primerizos con el que Miguel Santesmases (La fuente amarilla) consigue emocionar sin recurrir al sentimentalismo de todo a cien. Son muchas las películas que abordan el paso de la adolescencia a la vida adulta y muchas fracasan en su empeño. Días azules al contrario por ejemplo que L´ultimo bacio sale muy bien parada.
Si te gusta la canción que suena varias veces en la película. Aquí tienes la letra.
Javier Pereira | Tu vida en 65` | Heroína
Marta Larralde | León y Olvido
Óscar Jaenada | Camarón | Skizo | Somne | Noviembre