Después de ver Gladiator II como hay que verla, en un cine de pantalla gigante, con sonido Dolby (ni un mal retumbe) y sillón premium, lo cierto es que me he quedado que ni fu ni fa.
Hay quien agradece al octogenario Ridley Scott que retome por si mismo esta saga, después del éxito hace 24 años de la primera parte, Gladiator, cosa que ya hizo con Prometheus (2012) y Alien Covenant (2017) pero que no habÃa hecho con la primera saga de Alien (1979) o con Blade Runner (1982). Lo cierto es que cuando eres también productor, supongo que harás un poco lo que te gusta, y ya no tiene edad el hombre para hacer cosas a desgana.
He de decir que yo me quedé con las 2 pelÃculas suyas de las que hemos hablado, Alien y Blade Runner. El resto de su filmografÃa, sÃ, pero… buenas pelÃculas pero que tampoco me han marcado como esas dos.
Inciso reivindicativo de que el cine ya no es lo que era
¿Y qué hacÃa yo entonces en el cine viendo esto? Lo que digo siempre, que una pelÃcula sea buena o no, no tiene que ver con que te guste o no. Dependiendo de tus circunstancias, lo que te identifiques con ella o con algún personaje y la forma en que la veas, tiene mucho que decir. Y esta es una pelÃcula para ver en cine. Por mucha tecnologÃa que tengas en casa, pierde un punto por verse en la tele, creo yo.
Ahora mismo mi vecino está con sus estornudos diarios escandalosos, un policÃa pita en la calle, el otro vecino empezará en breve a tocar la guitarra y la vecina del primero con Radio MarÃa en su cocina y la ventana del patio abierta. ¿Es forma de ver cine con interés?
SÃ, os doy la razón a los que decÃs que el cine ya no es lo que era. En las últimas veces que he ido me he encontrado gente roncando o hablando sin parar, un móvil que suena, comer palomitas con la boca abierta, en enormes paquetes que no le dejan ver media pantalla, sorber la Coca Cola ruidosamente y lo último, ahora te traen alitas de pollo para comerte durante la proyección, que sÃ, que sÃ, que lo han visto estos ojitos.
Aún asÃ, volviendo a la pelÃcula, no es una mala historia, sà un tanto forzada, me parece a mi, y los giros en la historia, que no voy a contar para mantener la intriga, tampoco lo son tanto.
Reaparecen escenas de la primera como recuerdos, pero los personajes que repiten son los de Derek Jacobi y Connie Nielsen.
Denzel Washington está muy sobreactuado, Pedro Pascal cumple, sin alardes y el prota, Paul Mescal, de quien dicen que lo veremos mucho en breve y va para estrella, mira, no lo veo yo tanto, espero que me contradiga.
Esta reseña me está quedando un poco insulsa, como he dicho al principio que me ha dejado la pelÃcula, ni fu ni fa. Ha sido más reivindicativa que otra cosa. Asà que le cambiaré el tÃtulo.