DIRECTOR: Anders Morgenthaler
GUIÓN: Anders Morgenthaler
AÑO: 2007
PAÍS: Dinamarca
INTERPRETES: Kim Bodnia Peter Stormare Stine Fischer Christensen Villads
Milthers Fritsche
PRODUCTOR: Louise Vesth Marie Cecilie Gade Sarita Christensen
MUSICA: Henrik Lindstrand
FOTOGRAFÍA: Kasper Andersen
MONTAJE: Theis Schmidt
Sigo comentando películas danesas (tras Terriblemente féliz , Prague y 1:1 one to one). Ahora le toca el turno a Ekko de Anders Morgenthaler, que escribe también el guión de la misma.
Nos cuenta la historia de un padre, que secuestra a su hijo para pasar unos días en su compañía, una vez que la justicia le ha dado la espalda, y la custodia ha sido concedida a su exmujer. El padre se llama Simon, el hijo Louie.
La pareja va a parar a la casa familiar de Simon en la que se crió cuando era pequeño, la cual luego fue vendida yendo a parar a otros dueños. Por temas fiscales la casa ha sido embargada y permanece deshabitada, circunstancia que aprovecha Simon para campar a sus anchas por el hogar. Al lado de la casa, que se encuentra aislada del resto, lo cual les permite pasar desapercibidos, hay un lago que a Simon le trae en mente fatales recuerdos.
Simon vive en el momento presente atormentado por un hecho que todavía hoy, y eso que han pasado más de treinta años, no ha logrado superar: en su día su padre mientras ambos pescaban, se enredó con una red y finalmente se ahogó, mientras su hijo permanecía impasible, sin socorrorle. EL hijo a su vez lo vemos con la cara amoratadada. Deducimos por tanto que el padre cuando menos pegaba al hijo y este tenía a su progenitor en muy baja estima. A pesar de lo cual, este hecho, es recurrente en su mente, le impide dormir e incluso le hace mezclar realidad y fantasía.
Kim Bodnia que es un actorazo funciona muy bien en la piel de Simon. No quiere reproducir con su hijo su traumática infancia y trata de portarse bien con él, de quererlo, de pasar tiempo juntos, de jugar, pero hacer esto al margen del ordenamiento jurídico, como un proscrito tiene siempre fatales consecuencias.
La historia es mínima porque transcurre casi en su totalidad en la casa o alrededores de la misma, y en alguna escena que tiene lugar en un supermercado próximo donde la pareja hará acopio de provisiones.
Funciona Ekko como drama familiar, con su buena dosis de suspense e intriga, bien interpretada y con un ritmo notable se ve con gozo, si bien rehuye el efectismo y no presenta las características del típico cine de evasión, pues incide más en la naturaleza humana, compleja por definición, y en esa relación a veces difícil entre el hombre vs sistema.A