PelÃcula: 15 años y un dÃa. Dirección: Gracia Querejeta. PaÃs: España. Año: 2013. Género: Drama. Interpretación: Maribel Verdú (Margo), Tito Valverde (Max), Arón Piper (Jon), Belén López (inspectora Aledo), Susi Sánchez (Cati), Boris Cucalón (Toni), Pau Poch (Nelson). Guion: Antonio Santos Mercero y Gracia Querejeta. Producción: Gerardo Herrero y Mariela Besuievsky. Música: Pablo Salinas. FotografÃa: Juan Carlos Gómez. Montaje: Nacho Ruiz Capillas. Dirección artÃstica: Laura Musso. Vestuario: Maiki MarÃn.
Jon es un adolescente que vive con su madre, Margo, a la cual no deja de darle problemas. Al ser expulsado del colegio, Jon será enviado a un lugar costero a pasar una temporada con su abuelo, Max, militar retirado y separado de su mujer (de la madre de Margo).
Como un militar nunca se retira, la gracia de la pelÃcula está en ver si Max será capaz de bajarle los humos a su nieto, a la vez que éste (el abuelo) se deje dulcificar por un soplo de aire fresco, que le permita sanear y actualizar sus tradiciones y hábitos, perdiendo éstas rigidez.
La rigidez moral de Max le impide confesar su amor hacia la Inspectora Aledo, con la que tontea sin rematar la faena.
Una vez ubicado Jon en la casa de Max, comprueba que sin televisión, internet, tablet, ni teléfono móvil con android, lo mejor que puede hacer es salir de la casa, y ver qué hay por el pueblo. No le costará mucho hacer amistades, masculinas y femeninas, lo cual hará su estancia mucho más llevadera.
Una acción clave en esta historia marcará un antes y un después, y dejará las cosas en su sitio.
Es loable y plausible el empeño de Gracia Querejeta por abordar ese tema tan espinoso y correoso como es la volátil y efervescente adolecencia, cómo domeñar a esos chicos y chicas de 16 años con las hormonas a flor de piel, a punto de convertirse en adultos, con todo por hacer, y apenas nada hecho.
Si la pelÃcula en general no me ha disgustado, dado que Maribel Verdú, Tito Valverde y Arón Piper hacen unas buenas interpretaciones, hay algunas secuencias que resultan impostadas en demasÃa, pues llega el momento en el que el espectador debe llorar y ahà Maribel Verdú suelta su discurso, declamándolo.
Una de las virtudes de la pelÃcula es que resulta fresca, poco constreñida, vivaz y distendia en muchos momentos, pero en otros, se deja dominar por cierta rigidez, por ciertos tópicos, usos y costumbres contra los que como Max, no se pueden ir, y hay la pelÃcula pierde consistencia y credibilidad.
Ya que 15 años y un dÃa será la pelÃcula que representará a España en los Oscar, desearle mucha suerte. A ver si conseguimos entrar entre las cinco finalistas