Película: De tu ventana a la mía. Dirección y guion: Paula Ortiz. País: España. Año: 2011. Duración: 101 min. Género: Drama, romance. Interpretación: Maribel Verdú (Inés), Leticia Dolera (Violeta), Luisa Gavasa (Luisa), Roberto Álamo (Paco), Fran Perea (Pedro), Pablo Rivero (Manuel), Cristina Rota (Isabel), Carlos Álvarez-Novoa (tío Fernando), María José Moreno (tía), Luis Bermejo (Valentín), Julián Villagrán, Ramón Barea (Marín), Álex Angulo (médico). Producción ejecutiva: Kike Mora, Puy Oria, Raúl García, David Matamoros y Montxo Armendáriz. Música: Avshalom Caspi. Fotografía: Miguel Ángel Amoedo. Montaje: Irene Blecua y Javier García Arrendondo. Diseño de producción: Jesús Bosqued. Vestuario: Arantxa Exquerro y Guillén Doz
De tu ventana a la mía supone el debut en la dirección de Paula Ortiz. En la película se dan la mano tres historias, con las mujeres como protagonistas, ambientadas en distintas décadas.
En una de ellas, a una mujer soltera que reside con su hermana le diagnostican un cáncer de pecho, mientras se ensimisma con las fotos de los actores de cine, dejando de lado el amor que la brinda un sastre local.
En otra una mujer que vive en un casa en medio de la nada, ve cómo a su marido lo llevan preso, al tiempo que se queda embarazada.
En la última una joven descubre el amor, y casi de inmediato el desamor al constar que su amante, ha recalado en otros brazos de mujer, y que lo suyo fue una historia más.
Las tres historias se van intercalando, a veces con un ovilla de lana rojo como elemento conector.
La fotografía, obra de Miguel Ángel Amoedo es una maravilla. Las interpretaciones brillan a gran altura y en pos de un dramatismo, que a menudo cala en el ánimo del espectador a no ser que uno tenga el corazón forrado de piedra, se ofrecen silencios, pausas, esperas, recreaciones en los rostros de los personajes femeninos que plasman desamor, desesperanza, amargura, tristeza, soledad, pero al mismo tiempo alegría, iluisión, esperanza, porque la vida hay que cogerla por los cuernos y poner al tiempo buena cara si no quieren hundirse en la sima que se abrirá bajos sus pies.
Un debut interesante y plausible por lo singular de la propuesta (a pesar de la solemnidad y artificio en ciertas secuencias). Se podía haber hecho un trabajo más depurado con el guión y haber avanzado más en la cohesión, pero la película atesora momentos de gran intensidad dramática y poética, y se aleja de lo trillado de otras propuestas que pueblan las carteleras.