PelÃcula: A Roma con amor. TÃtulo original: To Rome with love. AKA: Bop Decameron / Nero Fiddled. Dirección y guion: Woody Allen. PaÃses: España, USA e Italia. Año: 2012. Duración: 112 min. Género: Comedia romántica. Interpretación: Woody Allen (Jerry), Alec Baldwin (John), Roberto Benigni (Leopoldo), Penélope Cruz (Anna), Judy Davis (Phyllis), Jesse Eisenberg (Jack), Greta Gerwig (Sally), Ellen Page (Monica), Riccardo Scamarcio (ladrón), Ornella Muti (Pia), Alessandro Tiberi (Antonio), Alison Pill (Hayley). Producción: Letty Aronson, Stephen Tenenbaum, Giampaolo Letta y Faruk Alatan. FotografÃa: Darius Khondji. Montaje: Alisa Lepselter. Diseño de producción: Anne Seibel. Vestuario: Sonia Grande
Woody Allen está localizando sus últimas pelÃculas en grandes ciudades: Londres, Barcelona y esta última en Roma. Si Barcelona lucÃa como una postal (nada que ver con la Bacelona que nos mostraba la Biutiful de Iñarritu), con Roma nos pasa 3/4 de lo mismo. Woody nos muestra una ciudad eterna preciosa, almibarada, monumental, lúbrica, vivaz, vibrante. Una ciudad que dan ganas de visitar. Qué decir de barrios como Trastevere, que parecen el paraÃso en la tierra, aunando la belleza de sus calles, con lo floral, el tráfago de personas y turistas y todo ello en un ambiente monumental cargado de historia.
A esta pelÃcula que se presume es una comedia no le visto la gracia en ninguna de las distintas historias que la componen, que son variopintas. En una de ellas una pareja de novios llega a Roma para conocer a los tÃos del muchacho que le ofrecerán un puesto de trabajo importante. Ella se irá a la peluquerÃa para acaber perdiéndose, fÃsica y espiritualmente pues acabar encamada con un delicuente que roba en hoteles al que la moza acude acompañando a un actor del que está enamorada platonicamente. A su vez, el muchacho recibe la visita de una prostituta (una Penelope Cruz que luce extraordinariamente sexy), que hará pasar por su esposa y consumando el acto sobre el cesped en medio de una reunión familiar al aire libre.
Por otra parte tenemos a un hombre corriente que un buen dÃa es seguido por los medios televisivos empeñados en registrar cada uno de sus actos por nimios que estos sean. Asà logrará salir de su anonimato y hacerse famoso temporalmente para luego volver al ostracismo, por otra parte deseado.
En otra historia un joven americano enamorado de su pareja que reside en Trastevere se enamora de la amiga de su novia, mientras a modo de conciencia un empresario de éxito de su paÃs, le hace ver lo erróneo de sus acciones.
La última de ella registra el enamoramiento súbito entre una americana y un romano y el pronto enlace que aboca al conocimiento mutuo de los progenitores de ambos. A un lado Woody Allen con su habitual verborrea y devaneos mentales, más cargante de la cuenta, junto a su mujer que es psicóloga. Los padres de él son un matrimonio formado por un hombre dedicado a las pompas fúnebres, que canta divinamente (en la ducha) y su mujer, ama de casa. Woody creo que ese talent para el canto y conseguirá llevar a buen puerto su objetivo.
Más allá de mostrar una Roma de postal, muy sugerente y extremadamente bella y apetecible, las historias me han parecido todas ellas una sandez, con unos diálogos sin gracia alguna. Un fiasco en toda regla.
La verdad que se antoja ver este tipo de movies, la anoto en mis pendientes saludos 🙂