Dirección Daniel Calparsoro
Intérpretes Ariadna Gil (Julia) Jordi Mollá (Samuel) Nacho Pérez (Félix) Omar Muñoz (Luis) Mar Sodupe (María)
Guión Daniel Calparsoro Ray Loriga Elio Quiroga
Fotografía Josep M. Civit
Música Carlos Jean
Montaje Iván Aledo
Daniel Calparsoro, uno de esos directores contracorriente del panorama español, que ha tocado todos los palos (comenzó su andadura en 1994 con Salto al Vacío), desde el género bélico (Guerreros) pasando por el de acción (salto al vacío) se adentra ahora en el género de suspense o de terror psicológico. El guión es obra de Calparsoro, Ray Loriga, y Elio Quiroga.
Los intérpretes son de renombre. Ariadna Gil en el papel de Julia, es una chica de treinta y pico años, con problemas psicológicos serios, que es rechazada en una entrevista de trabajo, por su excesiva preparación, lo cual es óbice para moldearla al antojo de la empresa, como le hace saber el entrevistador. Así arranca la película. El rechazo que sufre Julia en la entrevista acrecienta sus males y la hace empeorar.
Junto a su marido Samuel (Jordi Molla ) y sus dos hijos, la familia al completo traslada su residencia a una urbanización a las afueras. Una urbanización como lo son la mayoría, de múltiples casas clónicas, cortadas todas por el mismo patrón e igualadas por su fealdad y frialdad.
Calparsoro juega con la casa como si se tratara de un elemento clave a la hora de generar suspense y angustia en la protagonista. Debido a su enfermedad Julia sufre visiones y alucinaciones y cree encontrarse completamente sola en la urbanización. De hecho no se ve un solo vecino en toda la película.
Por donde pulula Julia a su alrededor no hay atisbo alguno de existencia humana. Cuando la situación se vuelve insostenible, el marido (Jordi Mollá hace un papel interesante pero cargante, encarnando al marido sufrido, muy habilidoso con las agujas) toma cartas en el asunto y los acontecimientos se suceden en tromba. La relación que Julia mantiene con sus hijos no la ayudan a recuperarse, sobre todo, por las hirientes palabras del hijo mayor, que la trata con desconsideración y la ofende a la menor ocasión.
Ausentes, no es una película de grandes sustos, al estilo americano, si no que se asemeja más a las producciones de suspense asiáticas, en donde los símbolos juegan más peso; los gatos, las videocámaras que registran todo cuanto sucede, el silencio, la soledad, donde la tensión se mantiene constante a lo largo de todo el film para lo cual ayuda y mucho la espléndida música de Carlos Jean
Calparsoro hace un efectivo manejo de la cámara con planos de 360º alrededor de la protagonista, o cuando Julia está empastillada y su miraba se nubla.
El final me defraudó, porque es en los finales en donde una película del género como esta, puede salir airosa o no, en el «sorprendente giro final». En este caso creo que el final es confuso y deja en el aire varios interrogantes y muchas preguntas sin contestar. Pero ojo, quizá esa fuera la idea de los guionistas. No dar al espectador una papilla fácil de digerir, con menos aristas que un balón de playa.
Destaca la esmerada interpretación de Ariadna Gil. A pesar del final, el conjunto de la película me gustó y ofrece otro enfoque sobre el género diferente del de otras producciones españolas ( El arte de morir, Tuno negro, La cámara secreta, por citar algunas ) a las que supera con creces.
Ausentes IMDB | Web oficial
Hola, a mi la peli me gustó, tiene un aire de suspense bien logrado. Ariadna está estupenda.
Coincido en que parece una peli Asiática
Basta ya de adolescentes tontos proclives a los grititos.
Aupa el cine español. Animar a todos a ver más cine español y menos bazofia venida de USA.