Black Hawk Derribado (Black Hawk Down)

Dirección: Ridley Scott
Año: 2001.
Interpretación: Josh Hartnett (Sargento Matt Eversmann), Ewan McGregor (Compañía Clerk John Grimes), Tom Sizemore (Teniente Coronel Danny McKinght), Eric Bana (Sargento de 1ª Clase Norm Hooten)
Producción: Jerry Bruckheimer y Ridley Scott.
Música: Hans Zimmer, Jeff Rona y Mel Wesson.
Fotografía: Slavomir Idziak.
Montaje: Pietro Scalia.
Diseño de producción: Arthur Max.
Dirección artística: Pier Luigi Basile y Marco Trentini.

Pelicula dirigida por Rydley Scott. Basada en hechos reales. Los americanos van a Somalia, a su capital, Mogadiscio en 1993 a imponer las resoluciones de la ONU y a detener al dictador de turno, que está provocando una matanza atroz de mas de 300.000 personas.
La historia cuenta, si se le puede dar dicho término, como fueron esas horas en las que los soldados americanos tomaron las calles de la ciudad, con el objetivo de dar caza al dictador.
Toda la película prácticamente es un tiroteo continuo. Más bien parece un videojuego al uso, en donde los que están abajo disparan a todo lo que se menea, ya que los malos, en este caso los somalies, se multiplican por todos los lugares, calles y tejados. La situación se agrava cuando uno de los helicópteros empleados en la misión es derribado, y sus compañeros han de emprendar la misión del rescate de los supervivientes.

Aturde tanto disparo y tan poco diálogo. Como no podía ser menos la cinta plasma el sentido imperialista patriótico de los yankees , con su dignidad, honor, si son héroes o no, etc.
Como espectáculo no está mal. Abundan los disparos, las explosiones, las imagenes impactantes de cuerpos mutilados, con el fin de dar mayor realismo a la piroctenia balística. Pero es hueca y vacía de principio a fin. Nada dicen los personajes y es mejor así. Los ponen en ese decorado, para que hagan tiro al blanco con los que les ponen delante, y dejen toda la ciudad hecha unos zorros. Al final mueren casi dos docenas de americanos, aunque da la impresión de que son unos cuantos más. Y de parte de los somalies hay más bajas, entre ellos civiles y niños (meroes efectos colaterales). Al final uno de los supervivientes llora a su amigo mientras hace la promesa de informar a los padres de que su hijo es un heróe porque la ha palmado en un sitio que no sabía ubicar en el mapa antes de ir.

Está claro que se requieren guerras y enemigos sobre los cuales probar la última tecnología bélica, y dar salida a todo el armamento bélico antes de que este se quede obsoleto.
En resumen, jua jua juaaaaaaaa, como el grito de estos americanos obsesionados con el baseball, una tomadura de pelo. Otra película más de tiros, de mucho ruido y pocas nueces.
Son bonitas postales, las imágenes tomadas desde el helicóptero cuando sobrevuelan las playas desiertas, de colores azules marinos, o cuando sobre el minarete se invoca al culto religioso, con cánticos que parecen de ultratumba.

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