TÃtulo original: Estiu 1993 (Verano 1993)
Año: 2017
Duración: 97 min.
PaÃs: España
Dirección: Carla Simón
Guion: Carla Simón
Música: Ernest Pipó
FotografÃa:Santiago Racaj
Reparto: Laia Artigas, Bruna CusÃ, David Verdaguer, Paula Robles, Paula Blanco, Etna Campillo, Jordi Figueras, Dolores Fortis, Titón Frauca, Cristina Matas, Berta Pipó, Quimet Pla, Fermà Reixach, Isabel Rocatti, Montse Sanz, Tere Solà , Josep Torrent.
!Qué jodida es a veces la infancia! !Qué jodido es perder a una madre (por el SIDA y antes a su padre por la misma causa) con muy pocos años! !Qué jodido es ir a parar a otra familia y ver que no encajas, creer que no te quieren!.
Esta preciosa y sentida pelÃcula autobiográfica de Carla Simón, a su vez guionista de la misma, con la que debuta en el mundo del largometraje, hay que apreciarla desde los ojos de un niño, porque si la vemos como adultos, la niña, Frida (gran elección la de la niña Laia Artigas, que dice mucho o casi todo con su mirar) nos puede resultar odiosa en su hermetismo en su comportamiento sibilino. Sin embargo, si bajamos de nuestro metro setenta y vemos el mundo desde un metro de altura, desde nuestros miedos, ansiedades e inseguridades, desde la tristeza que depara la ausencia materna como un horizonte sin lÃmites, desde ese sentimiento de no verse querido, de sentir que sobra, de que la cama de los padres no es sitio para ella sino para su hermanastra (que no es tal, pues luego vemos que su nuevo padre es su tÃo). Vista asà con esos ojos, regresando a la infancia, disfrutaremos la pelÃcula como se merece, apreciaremos todos los hilos que tejen las relaciones filiales, de padres e hijos, de nietos con abuelos, de hijos con madrastras (o tÃas) y hermanastras (o primas).
La pelÃcula ambientada en el verano de 1993 pasa de la mascletá del principio con ruido de cohetes y fiesta al apartamiento en una masÃa sita en una aldea rural en La Garrotxa, adonde se traslada Frida con su «nueva» familia, padres de una niña de tres años. Allá Frida se ve desplazada fuera de su medio y fuera del mundo. Sobre la relación entre las dos pequeñas siempre sobrevuela la tragedia sin llegar a consumarse. La pelÃcula se demora sin que pasen grandes acontecimientos, registrando el fluir del dÃa a dÃa, y cuando Frida no sabe si va o viene, tras tratar de llamar la atención de todas las maneras, llega el momento cumbre, una de las escenas que más me han emocionado hace mucho tiempo, cuando su nueva madre (gran interpretación de Bruna Cusà a la que vi hace poco en Incierta gloria, que comentaré en breve), se tumba a su lado, le mesa los cabellos, la acaricia, se tumba a su lado y la arrulla. No hacen falta palabras. Ahà Frida es cuando inicia su resurgir, aquel que le llevará a llorar a moco tendido sobre la cama, pues hasta entonces todo habÃa sido soportar, aguantar, sufrir, y finalmente llega la hora de dejarse ayudar, de dejarse querer, de abrirse al cariño generoso y sentido de los demás.
A ratos lenta, pero muy profunda. No sé si se llevará el Oscar pero premios a un lado la pelÃcula rezuma sensibilidad. Me parece una apuesta arriesgada para ir a los Oscar pero me parece bien, pelÃculas como ésta o como Blancanieves creo que muestran lo mejor del cine español, aquà catalán. Muy bien la directora, muy valiente. No tenÃa ni idea de que era autobiográfica.
Me recuerda al EspÃritu de la colmena, la niña lo hace genial, y me identifico mucho con el papel de la madre es una pelÃcula muy sensible y muy bien hecha o eso me parece a mà pues me he emocionado y me he dado un atracón de llorar al fin. Gracias
Preciosa pelÃcula. Me ha encantado porque la niña trabaja muy bien y es muy creÃble. Gran labor de la directora. Bravo por Carla Simón
.