Película: Eva.
Dirección: Kike Maíllo.
Países: España y Francia. Año: 2011.
Duración: 94 min. Género: Ciencia-ficción, drama. Interpretación: Daniel Brühl (Álex), Claudia Vega (Eva), Marta Etura (Lana), Alberto Ammann (David), Lluís Homar. Guion: Sergi Belbel, Cristina Clemente, Martí Roca y Aintza Serra.
Producción ejecutiva: Sergi Casamitjana, Aintza Serra y Lita Roig.
Fotografía: Arnau Valls Colomer.
Montaje: Elena Ruiz. Diseño de producción: Laia Colet.
Vestuario: María Gil.
Teniendo presente que Eva, es la ópera prima de Kike Maíllo (hasta la fecha había dirigido un par de cortometrajes y estaba dedicado a la publicidad al tiempo que participa en la impartición de talleres como docente en la ESCAC), los parabienes que puedo dedicar a esta bella película son ingentes. Lo que resulta más evidente es su cuidada factura, su puesta en escena, que es sencillamente soberbia. A esto añadimos unos personajes muy interesantes, en especial el de Álex, un científico tildado de genio por quienes le conocen, que decide volver a sus raíces, a su hogar, al serle ofrecido un trabajo al que saben que no podrá oponerse. Älex es experto en robótica.
Hay misterio en la historia. Algo le sucedió a Álex, cuando decidió poner tierra por medio y dejar todo patas arriba (como canta Sabina en uno de sus temazos «mi manera de comprometerme, fue darme a la fuga«), pues destrozó el corazón de Lana, que ahora está casada con el hermano de Álex, David, otro científico talentoso, en dura pugna con su hermano. Ya sabemos que las rencillas, odios, celos y afectos mal explicitados dan mucho juego.
No podemos olvidar a la niña que da título a la película, Eva, una niña «encantadora», divertida, inteligentísima, vivaracha y perspicaz en quien Álex reparará para llevar a cabo su proyecto, o esa es su primera intencion.
Sí, Eva es de ciencia ficción, pero hay tanta humanidad por medio, tantos sentimientos y emociones, que lo tecnológico, lo fantasioso, no es más que un barniz, para hacer aún más grande esta deliciosa película.
Si el cine es un arte que nos debe hacer experimentar sensaciones de todo tipo, viendo Eva, experimenté muchas cosas, desde la carcajada hasta el llanto contenido o distentido según la secuencia.