Amigo, es una terrorÃfica pelÃcula de 2019, dirigida por Óscar MartÃn e interpretada por Javier Botet y David Pareja. A una casa de pueblo llegan dos amigos. Uno de ellos se encuentra en silla de ruedas, Javi, con escasa movilidad, apenas puede hablar.  David le cuida y atiende, contando con el concurso de una asistente que ayuda a estirar los miembros de Javi y lo insta a realizar ejercicios respiratorios. Sobre esta aparente calma, sobre la idea reconfortante de la amistad, que lleva implÃcita el sacrificio personal en pos de los cuidados del otro, hay una historia oculta que se deja entrever. El espectador se pregunta a qué atienden los cuidados de David a Javi, si estos son sinceros o atienden a una culpa que hay que purgar ¿Hablamos acaso de una pretendida redención?
La pelÃcula en este sentido, gracias a un trabajado guion, va dosificando la información con cuentagotas, y nos permite hacernos una idea de qué relación tienen ambos y que cuentas están pendientes de saldar. Botet, ese actor altÃsimo y muy delgado, es quien está postrado en la cama, y David se encarga de alimentarlo, bañarlo, limpiarlo, moverlo como un fardo, con imágenes impactantes. No se puede abundar mucho en el argumento, porque serÃa destriparlo. Lo que sà se puede decir que al igual que en pelÃculas como Buried, que resultaban asfixiantes, en Amigo, las cartas se juegan excelentemente, porque se crea una tensión desde el primer momento, una violencia que no deja de crecer, una gestión de la angustia (esa penumbra que tan bien registra la fotografÃa de Alberto Morago) y el clÃmax brillante (estupenda la música de Manu Conde), que se manifiesta en cada encuadre, en unos ojos desorbitados, en un cuerpo subrepticio vermiforme que busca sobrevivir.
Nos encontramos ante una brillante pelÃcula de terror española que no habrÃa de pasar desapercibida. Ahora está disponible en Filmin, plataforma en la que la vi y la disfruté muchÃsimo.