Dirección y guión: Paco Cabezas.
Países: España y Argentina. Año: 2007. Duración: 105 min.
Género: Thriller, terror.
Interpretación: Ruth Díaz (Malena), Javier Pereira (Pablo), Pablo Cedrón (Gabriel), Leonora Balcarce (Amalia), Luciano Cáceres (Manuel), Isabella Ritto (niña), Héctor Bidonde (Dr. Lehrmann), Graciela Tenenbaum (Amanda).
Producción: Álvaro Alonso, Antonio Chavarrías, Juan Gordon, Miguel Ángel Rocca y Daniel Pensa.
Música: Óscar Araujo y Julio de la Rosa.
Fotografía: Andreu Rebés. Montaje: Fernando Franco.
Dirección artística: María Eugenia Sueiro.
Vestuario: Mariana Polski.
Estrenada a finales del 2008 sin demasiada repercusión, Aparecidos pasó casi sin pena ni gloria por nuestra cartelera (esos casos en los que una desacertada campaña de marketing hace un flaco favor a una película). Se merecía algo más. La historia está rodada en Argentina. La protagonizan dos hermanos, Pablo y Malena, que se trasladan a Buenos Aires, para firmar los papeles que permitan desconectar a su padre, en muerte cerebral, de la máquina a la que está conectado. Pablo más sentimental que su hermana, accede a firmar los papeles si antes se dan una vuelta por el país, yendo a la casa donde nacieron, para una vez allí tratar de conocer algo más de su pasado.
En esas andan cuando en la rueda del coche encuentran un cuaderno con anotaciones y fotos de unos crímenes cometidos 20 años antes. De pronto esa misma noche comienzan a suceder las mismas cosas que acontecieron dos décadas atrás, y los hermanos no saben muy bien qué pintan ellos en esa historia.
A los elementos de thriller y suspense se suman elementos históricos, porque esos aparecidos, son los desaparecidos, los que la dictadura argentina hizo desaparecer, tachándolos de comunistas subersivos. Es sabida la historia, una historia atiborrada de deshumanidad, de barbarie, de violencia inutil, que dejó toneladas de dolor en los familiares de los desaparecidos, de los arrojados al mar desde aviones repletos.
La historia tiene un muy buen tono. En verdad asusta, en especial las escenas del hotel, y luego las de la fábrica. La pareja protagonista funciona a las mil maravillas. Tanto Javier Pereira y sobre todo Ruth Díaz (El calentito) están estupendos, Ruth hace la que en mi opinión es la mejor interpretación suya hasta la fecha, con un rostro capaz de expresar un sinfín de sentimientos. El resto de secundarios les van a la zaga. La puesta en escena es notable. Todos los aspectos, fotografía, iluminación, sonido, están muy bien elaborados, y Paco Plazas sabe sacar lo mejor de los actores. La historia resulta entretenida desde el comienzo y la he disfrutado con agrado hasta el final. No es fácil hacer una película de estas características sin caer en lo inverosimil. En esas andas la película en todo momento para al final logra solventar la papeleta con elegancia. Aparecidos, es pues una interesante película de suspense dramático española, que a saber por qué razones no ha obtenido la recompensa que merecía.