Quizás, al menos en España, Greta Gerwing no sea tan conocida, pero para cualquier aficionado al cine esta mujer tiene renombre (y 3 nominaciones al Oscar, que es como se suelen medir estas cosas en USA). Ella misma escribe el guión (junto a su pareja el también actor Noah Baumbach) y dirige, aunque bien podrÃan haber interpretado algún papel, pese a que lo «idealista» de las Barbies no es su fuerte, dedicándose más bien al cine de interpretaciones más naturales.
A quién sà conocerá todo el mundo es a Barbie. Y lo digo de forma literal, porque es la muñeca más famosa a nivel mundial.
También desde que hace unos años irrumpiera a lo grande, todos conocemos a la prota de esta peli, la Barbie Margot Robbie (no confundir con Jaimie Pressly), a quien la cámara ama y lleva unos años a razón de un par de grandes pelÃculas como protagonista al año, y ha trabajado ya con los más grandes de la industria. La cámara la quiere y está demostrando ser una gran actriz, con interpretaciones profundas, además de la belleza que salta a la vista, desde luego.
Habrá a quien le sorprenda definir como profunda la interpretación de una muñeca de plástico tan banal como Barbie, pero es asÃ. La pelÃcula no se queda en la superficie y nos da una visión del mundo Barbie sobre la que reflexionar. Por un lado hay una crÃtica muy dura sobre la sociedad, pero además da palos a un lado y a otro poniendo el foco ante el absurdo y supuesto empoderamiento de las mujeres porque pueden comprar una muñeca que representa a una mujer que puede ser cualquier cosa y como una sociedad controlada por mujeres que hacen de menos a los hombres, es tan mala como lo contrario.
Cuando Barbie y su pareja Ken van al mundo real y este ve que es lo contrario a lo que hay en su mundo, en el que los hombres son sumisos y descerebrados, intenta una revolución. Entonces la vuelta que da su mundo, lo hace igual de malo que era el anterior.
Todo esto supone una reflexión metafÃsica sobre quienes somos, como la distinción entre hombres y mujeres es absurda y cuando bajamos al último escalón, todos somos personas y a cada persona hay que tratarla como tal y de forma individualizada.
Se critica el machismo, pero también el matriarcado, la vacuidad de la moda y la de la anarquÃa, lo absurdo de querer imponerse al resto, pero también de someterse sin miramientos.
En fin, que aunque de inicio pueda parecer una pelÃcula infantil y para no pesar, es todo lo contrario.
Hay unas cuantas escenas curiosas y que se rÃen de si mismas, como la que Barbie se cree fea y la voz en off nos cuenta lo absurdo de esta afirmación habiendo elegido como prota a Margot Robbie. O ese inicio «homenaje» a 2001 Una Odisea del Espacio con niñas y muñecas en vez de monos y huesos y Barbie como nuevo monolito reveladora de una nueva mente para las niñas.
Aparte de Margot Robbie, el gran protagonismo se lo lleva el Ken interpretado magistralmente por Ryan Gosling, un actor en plenitud que borda un personaje paródico pero que se mueve siempre en el borde del ridÃculo, sin llegar a tocarlo. Es muy meritorio y es un personaje de esos que evolucionan con la trama, que siempre se agradece.
Muy muy recomendable para ver, eso sÃ, con mente abierta y ganas de reflexionar, pero también con palomitas.