Título original: Centurion.
Dirección y guión: Neil Marshall.
País: Reino Unido. Año: 2010.
Duración: 97 min.
Género: Acción, bélico, drama.
Interpretación: Michael Fassbender (Quintus), Dominic West (Virilus), Olga Kurylenko (Etain), Noel Clarke (Macros), Liam Cunningham (Brick), David Morrisey (Bothos), Riz Ahmed (Tarak), J.J. Feild (Thax), Axelle Carolyn (Aeron), Imogen Poots (Arianne), Ulrich Thomsen.
Producción: Christian Colson y Robert Jones. Música: Ilan Eshkeri. Fotografía: Sam McCurdy. Montaje: Chris Gill. Diseño de producción: Simon Bowles. Vestuario: Keith Madden
Si todavía no la has visto, no sé a qué estás esperando. Centurion ofrece una película muy divertida, no exenta de violencia, que se disfruta de comienzo a fin. De entrada vemos a un hombre casi desnudo corriendo por la nieve. Luego sabremos que es un romano, soldado de la Novena Legión, a cargo del general Virilus, la cual está siendo golpeada por los Pictos, una tribu local, que ducha en guerra de guerrilla está obligando a los romanos a replegar sus fronteras.
No falta un ritmo trepidante, porque ese hombre del comienzo, Quintus Dias, junto a otros cinco soldados romanos, serán acechados por los pictos, por Gorlacon, su exploradora Etain y sus belicosos miembros de la tribu, y su vida será una continua persecución, subiendo y bajando montañas, surcando ríos, deambulando por laderas y bosques, hasta el desenlace.
El conjunto funciona a la perfección, el grupo romano es un todo compacto, viril, rudo, dotado no obstante de cierta sensibilidad. Como lider se erige Quintus que lucha por la unidad, por defender a su grupo y también lo que queda de su ejército, de su patria, si bien como se verá, no falta la dura crítica contra el sistema, dado que ese puñado de gente no valen nada para los mandamases, una legión que puede ser borrada de los anales de la historia de un plumazo sin mayor miramiento, si ello implica reconocer que el Imperio Romano no es tan poderoso e imbatible como se cree.
Dirige Neil Marshall, del cual ya hablamos en su día cuando estrenó The Descent, la cual me encantó. Marshall también es autor del guión, el cual además de ofrecernos una hora y media de genuino entretenimiento, también despliega un discurso antimilitarista, curioso porque la violencia no puede ser más explícita.