Dirección: Neil Burger.
Reparto: Edward Norton (Eisenheim), Paul Giamatti (inspector Uhl), Jessica Biel (Sophie von Teschen), Rufus Sewell (príncipe Leopold), Eddie Marsan (Josef Fischer), Jake Wood (Jurka), Tom Fisher (Wiligut), Karl Johnson (doctor).
Guión: Neil Burger; basado en el relato corto «Eisenheim: The illusionist» de Steven Millhauser.
Producción: Michael London, Brian Koppelman, David Levien, Bob Yari y Cathy Schulman.
Música: Philip Glass.
Fotografía: Dick Pope.
Montaje: Naomi Geraghty.
Diseño de producción: Ondrej Nekvasil.
Vestuario: Ngila Dickson.
USA 2006
Se me hace difícil coincidir con las opiniones que había oído sobre esta película. Ni creo que Paul Giamatti esté tan bien como algunos dicen, ni creo que tenga acción suficiente para resultar algo más que simplemente entretenida, ni la magia tiene tanto protagonismo, creo que es sólo un medio para contar una historia de amor muy típica, ni creo que el papel de Edward Norton sea suficiente para que pueda lucirse, es más, parece estar un poco comedido, ni he visto nada de Jessica Biel que no sea lo bien que luce ante la cámara, bueno, es posible que algún sonrojo digno de destacar.
La película se basa en un relato corto llamado «Eisenheim: The illusionist» de Steven Millhauser y cuenta la historia de un mago (Norton) que tras múltiples (y supuestas) peripecias vividas por el todo el mundo, se reencuentra con un viejo amor de su infancia (Biel), que en esos momentos es la prometida del malo malísimo de la película, el Príncipe heredero.
El tipo este, el príncipe, es muy desagrable y muy mala gente, pero ella le quiere para poder juntar las tierras… hasta que aparece el mago y cae rendida en sus brazos. Como además éste deja en ridículo al Príncipe delante de lo más florido de la ciudad, las cosas entre los 2 hombres empiezan a no ir bien y el sumiso jefe de policía cae encima del mago con todo el peso del que la (corrupta) ley es capaz.
En fin, la típica historia de amor que se encuentra con barreras, de la aristocracia y los poderes corruptos, que si consigue que el final te sorprenda y por el camino te entretenga, te lo puedes pasar bien. Conmigo no consiguió ni lo primero ni lo segundo, así que me pareció larga y con podo fundamento.
Sobre el tema de la magia, ya tenemos en carlera The Prestige, El Truco Final, habrá que verla porque aunque trate el tema de la magia también, parece tener un tono totalmente distinto.
Y llegados a este punto, un poco fuera de lo que toca exclusivamente esta película, yo me hago una pregunta: ¿Qué ha sido de la carrera de Edward Norton? Su debut n 1996 con Las 2 caras de la verdad me pareció sublime. Hacía una interpretación excelente, que poco después refrendó con American History X, que considero la cumbre de su carrera, aunque de ello han pasado ya 10 años. Con El Club de la Lucha mantuvo el nivel, pero a partir de ahí empezó a decaer y creo que no ha llegado a realizar ninguna interpretación ni cercana a esas. Más que amigos se quedó en una comedia romántico religiosa del montón, en Frida hizo un papelito no muy extenso, o en The Italian Job o El Reino de los Cielos (sí, sí, estaba en el reparto y la película es española, os lo aseguro) la cosa quedó en algo muy discreto.
En aquellas primeras películas para mí consiguió ser uno de mis actores favoritos, realmente confiaba en que nos daría muy buenas interpretaciones, pero parece haberse quedado en nada. No sé si por no saber elegir bien sus papeles. Su carrera me recuerda a la Timothy Hutton, que empezó debutando a lo grande y después, a pesar de seguir siendo un gran actor, no ha llegado a dar en el clavo con las películas elegidas.
Esperemos que se enderece y nos vuelva a dar alguna alegría.
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coincido con Nux, Norton está comedido porque el guión lo manda. No es perfecta, pero divierte, entretiene, a veces cautiva, y si bien no es una película mágica tiene un final de esos que atan todos los cabos sueltos que no está tan bien resuelto como en «sospechosos habituales» pero que nos deja una película bien construida e interpretada, que ofrece algo distinto y ya solo por eso merece un visionado.
Yo no creo que Norton haya decaído en esta película, ni mucho menos. Los errores de la misma hay que achacarlos, en mi opinión, al guión.
A mi, sin duda, me gustó, a pesar de que el final se podría haber hecho muchísimo mejor…