El taxista ful crítica película

El taxista ful cartel películaDirección y guión: Jo Sol.
País: España.
Año: 2005.
Duración: 87 min.
Género: Disidencia rabia-alegría.
Interpretación: Pepe Rovira, Marc Sempere, Marcos Rovira «Makoki», Dinero Gratis, Santiago López Petit, Vicente Escolar, Miguel Ángel Lapuyade, Jonás Lapuyade, Francesc Arnau, Antoni Laparra, Marina Garcés.
Producción: Jordi Rediu y Norbert Llaràs.
Música: Jalea Real, Lhasa y 99 Posse.
Montaje: Sergio Dies

El taxista ful o el taxista falso. Pepe Rovira con cincuenta tacos y sin curro, decide apropiarse de taxis ajenos, una herramienta de trabajo como él dice y trabajar con ellos por la noche. Taxis que abandona días después sin desperfectos, dejando algo de dinero en la guantera, por el consumo de gasolina y desgaste del vehículo. Algunos taxistas cuando es sabida la forma de proceder del ladrón de taxis, ni siquiera lo denuncian.

La policía lo detiene varías veces y hay finalmente una sentencia en la que le comunican que lo quieren internar en un centro psiquiátrico. Marc, es un joven de unos treinta años que entra en contacto con Pepe, lo acompaña a un abogado que tras oir la versión de sus hechos quiere presentarlo como delicuente político. ¿Delincuente político? se pregunta, Pepe. Él no es un delicuente político pero tampoco se considera un delincuente común, lo único que tiene claro es que no quiere ir a la cárcel.

La situación familiar de Pepe al estar desempleado se ha deteriorado, con su mujer y su hijo, por la falta de medios económicos y Pepe a fin de que no lo localicen se va de okupa con Marc, entrando en un mundo para él desconocido. Conoce así al grupo Dinero Gratis, los cuales como dicen en sus carteles «No queremos trabajo queremos dinero. Dinero gratis». Pepe Rovira, sin embargo si quiere un trabajo y aboga por un trabajo digno. Visiones contrapuestas, pero según dicen los opuestos se tocan.

Uno de los teóricos de Dinero Gratis, habla; si admitimos que no se puede hacer nada, ya se abre un camino. Un camino de posible-imposible en el que intentamos vivir. No entiendo nada dice Pepe. No eres el único, hijo mío.

Para Pere el movimiento okupa es algo nuevo, que no le causa especial ilusión, dado que para los que allí okupan lo que hacen se trata de un proyecto común, una actitud vital y él está de okupa porque no tiene adonde ir, lo hace pues a la fuerza, no voluntariamente. Valora Pere de su compañero Marc y sus amigos como estos miran el mundo como estudiándolo, son gente que quiere aprender, que sino te ayuda te ofrece al menos su contacto, su tiempo y no a cambio de dinero.

Pepe no quiere cambiar nada, no quiere cambiar el mundo, sólo quiere que su suerte cambie.

¿Se puede sortear el miedo a la precariedad?. Pepe reflexiona: quiero vivir hasta que me muera. No hay futuro para él, el futuro ya está bastante claro dice, sólo quiere existir, con esa mezcla de rabia y alegría. ¿cómo podemos agujerear la realidad?, se pregunta Pepe en una de las concentraciones de Dinero Gratis a las que acude.

Más voces se suman a la de Pepe: en el futuro la casa será mía pero yo ya no existiré. Hay que ocupar viviendas con gente dentro.

Los textos de la política se nutren de los libros: Por una política nocturna (Mar Traful), Horror vacui (Santiago López Petit), Libro de 8/1 tumbado en el espejo.(Vicente Escolar Bautista)

El problema es la silla, la silla es un objeto incómodo, un invento de tortura, no hay postura fisiológica que se corresponda con ese objeto, el verdadero ataque es quitarle la silla a la gente, hay que ocupar los comedores llenos en la cena de Navidad.

Si tú te echas la culpa de tu situación, niegas la posibilidad del conflicto y el poder triunfa.
Antes el concepto de trabajador era grupal, ahora estás solo y la culpa es sólo tuya.

Pepe comenta en el pase de la película por el Festival de San Sebastían, que la película es una invitación a la reflexión. Ni si quiera le importa que guste o no la película.
Sobre la mesa, el trabajo, el paro, la acción colectiva, la soledad, plasmadas en este falso documental con las herramientas del Videoactivismo.

No hay censura ni apología. Nadie es más que nadie, sino que en todo caso se trata de ver las cosas de otra manera; sí pero no, no pero sí. Gente que hace otras cosas, que se moviliza, que se refuerza como grupo, que desde la asunción de que nada puede cambiar siguen peleando con pancartas o con palabras, la saliva como arma y la ilusión como alimento. ¿predicar en el desierto? ¿fomentar el absurdo?

El taxista ful es una rara avis del panorama cinematográfico español que bien merece ser vista. Si la ves en DVD te recomiendo que veas todos los extras; el coloquio con el público tras el paso de la película, los teasers, las escenas eliminadas, y la película hasta el final, con títulos de crédito incluidos.

Al igual que Callejeros (programa de Cuatro que aborda problemáticas reales sociales poco divulgadas), El taxista ful confirma que la realidad es múltiple y abigarrada, más allá de los contenidos uniformados que divulgan los medios de comunicación masivo que dejan poco margen para la disidencia o para el pensamiento autónomo o propio a pesar de la era de la información, que desgraciadamente va toda por el mismo camino.

El taxista ful es una película que pone el ojo en algo que no vende y que posiblemente no interese demasiado a mucha gente, pero como dice Marc, no se trata de convencer a nadie, lo que hay es evidente. Unos volverán la cabeza, otros silbarán y otros quizá reflexionen sobre ello.

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