En la línea de tiro crítica película

En la línea de tiro cartel películaAño: 2006
Género: Acción
País: Estados Unidos
Intépretes: Lou Diamond Phillips (Eugene «Vash» Vasher) Yancy Butler (Emily Johanson) Tom Wright (John Hatem) Jeff Speakman (Kilmer) Glenn Morshower (Ted Billings)
Troy Baker (Brice Billings) Scarlett McAlister (Mabe)
Duración: 96 minutos
Título Original: Striking Range Dirección: Daniel Millican
Producción: Daniel Millican / Jeff Rodgers
Guión: Daniel Millican Fotografía: Vincent Wrenn
Música: Josh Goode

Ted Billings es un físico que fabrica armas de última generación en su empresa. Cuando crea su último prototipo, un grupo de asesinos quiere hacerse con él. Billings contratará entonces, a través de Emily, su jefa de seguridad, a un grupo de profesionales expertos en seguridad liderados por Vash, para cubrirse las espaldas. Una noche los asesinos toman la empresa y los chicos de Vash deben repeler la agresión.

Como película de acción «En la línea del tiro» es abrumadoramente aburrida, trufada de diálogos penosos que son mero relleno; una sucesión de memeces. Personajes cuya misión interpretativa pasa por sujetar un arma o por llevar un pinganillo en la oreja. Música rockera para aderezar este desaguisado infumable. Una historia que puede ser contada en un corto de cinco minutos, incluidos los títulos de crédito. Entre los protagonistas gente como Lou Diamond Phillips y el televisivo (24) Glenn Morshower, a cual peor. Trabajos como estos no ayudarán mucho a mantener su carrera.

En la línea del tiro es una bazofia insulsa, tediosa y aburrida que ni siquiera nos permite a pesar de sus carencias, pasar una hora y media entretenida.
Una perdida de tiempo, al fin y a la postre, para una película de bajo presupuesto que no justifica su ínfima calidad. Con tópicos como el de la chica, Emily curando la herida de bala al tiroteado, Vash, el rollito que tuvieron ambos y quieren retomar, el padre que denosta a su hijo a la menor ocasión y el cual se cobra venganza, el que se vende por dinero porque tiene una hipóteca y facturas que pagar etc, etc.

Cuando antes alguno quería tirarse el moco de que había estado en una guerra y así hablar de valor, honor, dignidad y demás paparruchadas con las que impresionar a sus interlocutores recurrían a Corea o Vietnam, ahora sin embargo ahora se recurre a la guerra en los Balcanes o La Tormenta del desierto como hace Vash para tocar la fibra de John, uno de sus hombres vendido al mejor postor.

Emily es la que más carga dramática atesora y suelta la mayoría de las frases, dirigidas a Vash, tales como:

cuando me dejaste, dejaste algo más atrás, pero no sobrevivió.
eres tú quien me enseñaste todo sobre los intereses personales..
¿nunca pensaste que la forma de ser libre de verdad, es morirse?

Si los guionistas que están en paro son como Daniel Millican que ha pergeñado este bodrio, además de dirigirlo, se podían quedar en paro de por vida.
Si hay películas que se escriben con mayúsculas, otras películas, como esta, se hacen con minúsculas y tinta invisible y no merecerían ni un comentario, por malo que sea en nuestra blog, pero es Navidad y el amor inunda nuestros corazones, anega nuestros cerebros y exprime nuestras tarjetas.

Nuestra puntuación

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