La dama de honor crítica película Claude Chabrol

Dirección: Claude Chabrol.
Países: Francia y Alemania.Año: 2004.
Duración: 110 min.
Género: Thriller, drama.
Interpretación: Benoît Magimel (Philippe), Laura Smet (Senta), Aurore Clément (Christine), Bernard Le Coq (Gérard), Solène Bouton (Sophie), Anna Mihalcea (Patricia), Michel Duchaussoy (Vagabundo), Suzanne Flon (Sra. Crespin)Guión: Pierre Leccia y Claude Chabrol; basado en la novela de Ruth Rendell.
Producción: Antonio Passalia, Patrick Godeau y Alfred Hürmer.
Música: Matthieu Chabrol.
Fotografía: Eduardo Serra.
Montaje: Monique Fardoulis.
Diseño de producción: Françoise Benoît-Fresco.
Vestuario: Mic Cheminal.

Tomando como punto de partida una novela policiaca de Ruth Rendell, Claude Chabrol pergeña una película de suspense y amor desaforado.

Philippe es un joven de veintipocos años que vive con su madre y sus dos hermanas. En la boda de una de sus hermanas Philippe conoce a Senta, que es «la dama de honor» de la novia. A partir de ese momento la existencia del joven cambiará para siempre. Senta a golpe de cadera seduce al joven, lo envuelve, lo devora y succiona, hasta hacerlo enloquecer. «Eres el hombre que he esperado toda mi vida», le dice al poco de conocerse.

Philippe un joven responsable, trabajador que cree tener las cosas claras, ve como su percepción se empaña, como sus neuronas se emponzoñan de esperma y como el aroma de Senta lo enciende al roce.

Senta le comenta a Philippe que en muestra de su amor debe hacer cuatro cosas: plantar un libro, escribir un poema, matar a alguien, o mantener una relación sexual con alguien del mismo sexo.

Philippe se lo toma como un juego, pero los devaneos de Senta toman visos de verosimilitud cuando le dice que ha matado a un hombre en muestra de su amor. Philippe duda, no sabe que hacer, pero intuye que ya es irremediable, que hace tiempo que está en caída libre y ya no hay vuelta atrás.

La película que tarda un rato en arrancar, cuando Senta hace aparición coge fuelle, y los elementos de suspense te mantienen en vilo, con una narración aparantemente sencilla que esconde más de lo que muestra. Con Mcguffin incluido (el busto de piedra)
Me ha encantado la actriz que encarna a la voluptuosa Senta, Laura Smet, su pareja el actor Benoît Magimel como Philippe, le da a su papel los matices precisos y va ganando en intensidad a medida que se llega al final.
La fotografía es obra del portugués Eduardo Serra (Diamante de Sangre, Confidencias muy íntimas)