Dirección: Marina Seresesky
Reparto: Carmen Machi, Pepón Nieto, Kiti Manver, Jon Kortajarena, Montse Pla, Ricardo Nkosi, Malcolm Sitté
PaÃs: España
Año: 2019
Guión: Marina Seresesky
FotografÃa: Sergi Gallardo
Música: Fernando Velázquez
Lo nunca visto, a pesar del tÃtulo resulta una comedia bastante previsible. La llegada de tres hombres y una mujer negros a un pueblo de la sierra, nevado, que está en vÃas de extinción, pues como otros tantos pueblos forman parte de la España vacÃa que no encuentra manera de repoblarla aunque sea ofreciendo una alternativa a quien llega a España sin nada.
Al frente del pueblo, Fuentejuela de Arriba, Teresa (Carmen Machi), la mujer del alcalde que se postula como tal, porque su marido que es un vendido se presenta en Fuentejuela de Abajo. Queda patente ahà las desavenencias entre pueblos próximos que parecen las dos partes de un melón, mal avenidas.La llegada de los cuatro extranjeros es suave porque van a caer en manos de Santa Teresa que les ofrece auxilio, cobijo, alimento, a pesar de que muchos los ven como salvajes o ese es el relato oficial que corre por los mentideros del pueblo cuando les informan de que cuatro delicunentes, huidos, peligrosos y negros andan sueltos.
Luego viene el engarce de los cuatro extranjeros en la comunidad, ocupando distintas casas, que permite el amor entre un hippie y la mujer negra, entre Jaime el golmajero del pueblo especializado en la elaboración de yemas de toda clase y uno de los hombres negros, saliendo asà del armario y de la madre del panadero que quiero a un negro en su cama, porque este desmintiendo a Dann, sà puede.
Las situaciones cómicas se suceden con escasa gracia como la caÃda del golmajero Jaime (Pepón Nieto) al pilón o los postreros casamientos improvisados para evitar que los extranjeros no abandonen el pueblo. O la mujer del alcalde Fuentejuela de Abajo pasándose a al pueblo de Arriba, harta de su pueblo, de su marido, en fin.
Alcanza tal grado de inverosimilitud la pelÃcula aunque quiere adoptar cierto realismo rayano en el casticismo que resulta una fabula truncada, pues uno tiene la sensación de que no hay ninguna lógica interna que la historia hace aguas por todas partes (lo interesante hubiera sido cómo afrontar la llega del otro, del extraño, el extranjero, y que dicha arribada hubiera supuesto un punto de inflexión y materia de reflexión para los lugareños (que en todo caso obran no por compasión sino de forma utilitarista o de supervivencia: o los integramos o desaparecemos), y no se hubiera despachado de una manera tan pueril, complaciente y emoliente, porque en ningún momento el punto de vista se fija en el recién llegado, en el extranjero al que se le endilgan sin apenas esfuerzo todos los prejuicios y tópicos de una comunidad cerrada), que no se sostiene de ninguna de las maneras y que salvo Machi, el resto, tanto Pepón Nieto, Manver, Tous, Kortajarena son poco más que atrezzo humano, marionetas sobre un decorado de corchopán.