Capitan Conan (Bertrand Tavernier 1996)

Capitan Conan poster película
TÍTULO ORIGINAL Capitaine Conan
AÑO 1996
DURACIÓN 129 min.
PAÍS [Francia]
DIRECTOR Bertrand Tavernier
GUIÓN Jean Cosmos & Bertrand Tavernier (Novela: Roger Vercel)
MÚSICA Oswald D’Andrea
FOTOGRAFÍA Alain Cloquart
REPARTO Philippe Torreton, Samuel Le Bihan, Bernard Le Coq, Catherine Rich, François Berleand, Claude Rich, Christophe Calmel

Bertrand Travernier nos regala una película ambientada durante la I Guerra Mundial. Las tropas francesas reciben con alborozo el armisticio firmado en noviembre del año 1918. Tras cuatro años guerreando en los Balcanes ven la oportunidad los soldados de volver al hogar.

La historia se centra en la figura del teniente ascendido a Capitán Conan, quien junto a otros hombres, sacados de prisiones y llevados al frente, se encargarán de combatir cara a cara al enemigo, cuchillo en mano y granadas en ristre, trinchando al oponente como si de un animal a quien de abrir en canal se tratara. En esa locura de sangre y violencia es donde Conan se siente cómodo. Luego está por ver, si será capaz de sobrellevar una existencia pacífica, lejos del olor de la pólvora y del brillo de la sangre, perdido en una aldea rural esperando el advenimiento de la parca.

A esta visceralidad que encarna Conan se opone la de su amigo Norbert, el Acusador, quien al tiempo que alaba sus virtudes critica sus defectos, moviéndose entre dos aguas, admirando ciertas conductas y deplorando otras, sin tener muy claro como juzgar las faltas que cometen los soldados lejos del frente de batalla.

El alegato antibelicista que nos ofrece Travernier no puede ser más explícito. La guerra resulta chusca, cutre, nada espectacular (no tiene nada que ver con la épica de Salvar al soldado Ryan por ejemplo). Los hombres mueren sin el menor sentido, el número de bajas se cuenta por miles (recordemos que murieron 9 millones de personas en esta Guerra), mientras el alto mando, va reponiendo las filas diezmadas con sangre fresca, como peones de ajedrez que no tienen menor importancia, pero sin los cuales sería imposible lograr el jaque mate.

Conan y sus 3.000 hombres, está convencido que gracias a ellos ganaron la guerra, porque según él unos la ganaron y otros simplemente la hicieron.
Está brillante el actor Philippe Torreton (al igual que Hoy empieza todo) en la piel de Conan. Capitan Conan es un ejercicio de buen cine, una alegato contra la guerra que funciona por su cantidad de matices, de graduaciones, porque rehuye los topicazos, y ahonda en la compleja naturaleza humana, porque es en ese territorio de grises donde se mueve el héroe y el villano.

Nuestra puntuación

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