Una de las series que empezamos a ver antes de la pandemia dichosa fue El Vecino. Se estrenó a principios de 2020 y su humor de barrio y sus interpretaciones frescas nos gustaron, y mucho.
Ahora vuelve con la segunda temporada (no han publicado aún todos los episodios) con la misma frescura y con una trama que se les va un poco de las manos. Al principio es difÃcil adivinar por donde va y este humor tontorrón a más de uno le puede sacar de la serie. Pero con el pasar de los episodios la historia se vuelve más loca, más graciosa y más impredecible.
A ratos me da la impresión de los actores y actrices están improvisando, lo que tiene su punto bueno y malo, pero desde luego le da naturalidad y más de un momento he soltado alguna risotada. También he decir que en otros la impresión ha sido de qué me están contando y que está un poco forzada la historia.
Como digo, es una serie para entrar. Los protagonistas Quim Gutiérrez y Clara Lago están en la misma lÃnea de la primera temporada y creo que más histriónicos que en cualquier otro papel en los que los hayáis visto, por muy comedia que sea.
Pero es que el punto fuerte son los secundarios que los arropan. Todos ellos aportan su granito de arena la historia y a pesar de ser adyacentes, les roban el protagonismo a ellos dos. Desde los compañeros de los héroes (Adrián Pino y Catalina Sopelana) que están para comérselos, hasta la alcaldesa de Madrid (Gracia Olayo), Andoni Ferreño haciendo de si mismo también, el exdrogata interpretado por Denis Gómez o el gran descubrimiento (para mÃ) de Javier Botet.
Y entre los secundarios destaca Fran Perea, riéndose de si mismo e interpretándose a si mismo, todo muy para adentro, pero hay que verlo, porque tiene miga. Cualquier cosa que podáis pensar seguro que se queda corta ante el humor que destila.
Y mención especial para la BSO integrada totalmente en los episodios y con mucho peso en la serie. Me gustarÃa saber algo más de música para detallaros algo más, pero solo os puedo decir que la busquéis en Spotify.
Un superhéroe y una superheroÃna castizos y un humor chusco y de barrio que no os podéis perder. Sé que me repito de lo dicho en la primera temporada, pero era lo que se esperaba de la serie, y lo ha cumplido. Aúpa ese vecino.