Nueva entrega de PelÃculas que aunque no lo creas son remakes. Después del éxito de ese primer listado se nos habÃan quedado pelÃculas importantes en el tintero. PelÃculas de las que todos hemos oÃdo hablar, que han ganado multitud de premios o que están en esa memoria colectiva como si fueran únicas.
Pero desengañaros, no se trata más que lo mismo que ya se habÃa rodado antes. SÃ, en algunos casos se mejora, se adapta a los nuevos tiempos en los que se estrena o se da una nueva visión. No vamos a decir que todo es negativo.
Espero que os guste y que en algunos de los tÃtulos os sorprenda. Y esto da para una tercera…
Charlie y la fábrica de chocolate (Tim Burton, 2005)
Tim Burton es de los que aunque haga remakes, no se le puede negar que sus pelÃculas son «originales», aunque en otro sentido de la expresión. A la anterior versión en España se le llamó Un mundo de fantasÃa y Gene Wilder hacÃa el papel de Willy Wonka que después interpretó Jonny Deep. Ambas adaptan la novela de Roald Dahl que por cierto, fue también guionista en esa primera versión.
El Rey León (Rober Allers y Rob Minkoff, 1994)
Le tengo un poco de manÃa a esta pelÃcula, por cosas mÃas. Las subsiguientes partes que se han hecho y nuevos remakes en animales de verdad (ejem) no han ayudado a mejorar mi percepción sobre ella.
No es un remake como tal, vale, lo acepto, pero su argumento está basado en una novela, Hamlet, que ya se habÃa llevado anteriormente al cine. El Hamlet de Lawrence Oliver de 1948 quizás sea la de más repercusión, porque la de Kenneth Branagh, oh oh, es un remake. Igual la cuelo en una tercera entrega, en esta ya no.
Ocean’s Eleven (Steven Soderbergh, 2001)
Pues sÃ. George Clooney y compañÃa no le hacÃan ni sombra, en lo que a chulerÃa y camaraderÃa se refiere al grupillo del Rat Pack que protagonizó la original, de 1960 con Frank Sinatra a la cabeza.
Grandes repartos en ambas pelÃculas y divertidas de ver.
El cabo del miedo (Martin Scorsese, 1991)
La relación entre Scorsese y De Niro ha dado muchas grandes pelÃculas. Imposible no recordar al actor y su famoso: «Abogaaaaaaadoooo. Sal ratita, quiero verte la colita».
Pero no, no es una pelÃcula original, sino el remake de El cabo del terror, donde Gregory Peck y Robert Mitchum se enfrentaban también años antes, en 1962
The italian job (F. Gary Gray, 2003)
Me gustó mucho esta pelÃcula en su momento, tiene acción, es entretenida y el reparto responde.
Pero me sonaba mucho la escena de los minis huyendo por las calles y es que la pelÃcula original, Un trabajo en Italia de 1969, con Michael Caine a la cabeza es aún mejor.
Desperado (Robert RodrÃguez, 1995)
Pongo esta pelÃcula porque muchos la conocerán por tener a nuestro patrio Antonio Banderas como protagonista, pero hay muchas similares.
Directores que con poco dinero hacen una peli de relativo éxito, véase aquà a Robert RodrÃguez con El Mariachi, 1992 y la rehacen con más dinero. Fin de la historia, al saco de las prescindibles (ambas).
Con faldas y a lo loco (Billy Wilder, 1959)
Billy Wilder, Marilyn Monroe, Tony Curtis y Jack Lemon. Calidad, sensualidad, risas y mucho entretenimiento, ¿a quién le importa si es original?
Pero, efectivamente, no lo es, es un remake de una pelÃcula francesa de 1935 titulada Fanfare d’amour.
Ben-Hur (William Wyler, 1959)
Pensar en Ben-Hur es pensar en Charlton Heston (y sus manos frÃas). Pero no, esa versión del gran William Wyler de 1959 no es la primera (ni la última) aunque sea la más épica y famosa.
La primera es de muchos años antes, 1925, dirigida por Fred Niblo y olvidada ante la grandilocuencia de la nueva.
La mosca (David Cronenberg, 1986)
PodrÃa pensarse en esta como una pelÃcula única en su especie, nunca mejor dicho. No se puede reprochar nada, porque la ambientación que Cronenberg le da lo es, pero está basada en un relato corto y ya tuvo una versión anterior en 1958 dirigida por Kurt Neumann, que además dio pie a secuelas, por cierto.
Esencia de mujer (Martin Brest, 1992)
Quizás su principal baza sea haber conseguido que con ella lograra el Oscar Al Pacino, en una interpretación excelente, por otra parte.
Pero este gruñón ciego lo habÃa bordado ya años antes Vittorio Gassman, otro grande, en 1974 en la pelÃcula italiana Perfume de mujer.