Marta Etura está de estreno, en cartel tiene Remake de Roger Gual y AzulOscuroCasiNegro, En Fotogramas en abril le hacen esta entrevista que reproduzco.
A esta donostiarra menuda de mirada expresiva y sonrsisa cautivadora, le han bastado cinco años, desde su debut con Sin vergüenza, para situarse, con dos nominaciones al Goya, entre los valores más firmes de nuestro cine. A punto de comenzar el rodaje en Chile de Desierto sur, de Shawn Garry, nos habla de sus proyectos, del temor a que la fama acabe con su intimidad y de sus dos nuevas películas, Remake, primera cinta en solitario de Roger Gual (tras Smoking Room, codirigida con Julio D. Wallovits), y AzulOscuroCasiNegro, opera prima de Daniel Sánchez Arévalo. Dos dramas sazonados con humor, en los que encarna, respectivamente, a la novia de un chaval que revive durante un fin de semana su infancia en una comuna hippy de los años 70, y a una joven que cumple condena en prisión.
FOTOGRAMAS: ¿Cómo se lleva empezar desde arriba, con una nominación al Goya?
MARTA ETURA: Bueno, es que yo no empecé con una nominación al Goya. Yo comencé a los 17, cuando me vine de San Sebastián a Madrid y entré en la escuela de Cristina Rota, donde trabajé cuatro años. Cuando estaba en el último curso, apareció Joaquín Oristrell, que preparaba el guión de Sin vergüenza, sobre escuelas de interpretación y actores, y tuve la gran suerte de que me cogió para su película. A partir de ahí, gracias a Joaquín, que me abrió la puerta de mis sueños, ha venido todo rodado. La nominación al Goya a la Mejor Actriz Revelación por La vida de nadie, mi segunda película, fue un regalo; pero no hay que olvidar que es un premio para alguien que empieza.
F.: Y este año otra nominación por Para que no me olvides, de Patricia Ferreira.
M.E.: Un premio es la recompensa por un trabajo bien hecho, y el Goya es el galardón más importante del país. Es estupendo que reconozcan lo que haces, algo muy de agradecer, pero los premios no te dan ni te quitan nada.
F..’ Se los empiezan a dar también fuera, como el Shooting Star 2006, que ha recibido, con otros 19 actores jóvenes europeos, en el marco del Festival de Berlín.
M.E.: Fue muy gratificante; me ha servido para conocer la industria de otros paí-ses europeos y para abrir puertas a otros mercados. He comprobado, además, que fuera tienen mucha mejor opinión sobre el cine español que aquí.
F.: ¿Cómo ve este momento de nuestro cine?
M.E.: Se hacen películas malas y buenas, como en todas partes, pero las buenas son muy buenas. Tenemos directores y gente muy interesante, profesional y creativa.
F.: ¿Se siente parte de alguna generación?
M.E..» No me gustan nada las etiquetas. El ser actor revelación o actor joven son cosas que pasan. Todo pasa. Yo soy una actriz, sin más.
F.: ¿No quiere ser la musa de Manuel Gutiérrez Aragón, con el que ha rodado El caballero Don Quijote y La vida que te espera?
M.E.: Etiquetas, cero. Adoro a Manuel Gutiérrez Aragón, nos llevamos muy bien, y hacer La vida que te espera fue maravilloso, pero no me va nada eso de la chica de…
F.: ¿Prefiere directores noveles o veteranos?
M.E.: Me da igual. Me importa la persona, no si ha hecho 80 películas. Cada uno tiene cosas buenas y malas. Manuel Gutiérrez Aragón es un sabio del cine, pero un novel llega con una ilusión que no tiene el consagrado. Eso es maravilloso y se contagia al equipo.
F.: ¿Qué le atrajo de Roger Gual y de Remake?
M.E.: El guión me gustó mucho. Luego, Roger me llamó y me dijo que me quería para el personaje. Eso te da la tranquilidad de saber que hay algo en ti que inspira confianza Me planteó que nos íbamos a encerrar todos en una casa a rodar, que se iba a hacer de forma muy parecida a Smoking Room, cámara en mano, en HD (Alta Definición). Había muchas cosas que hacían la película muy atractiva.