Remake a la francesa
Efectivamente, muchos habréis visto la película italiana Perfectos Desconocidos (de la que ya os hablamos en cuak), pues esta viene a ser exactamente igual, porque, aunque no he visto la original, los personajes se repiten y las situaciones también.
Es divertida aunque en caso de haber visto la original, no creo que aporte mucho.
La historia es la de varias parejas de amigos que se reúnen para cenar durante un eclipse de luna. Uno de los presentes propone un juego: dejar los teléfonos encima de la mesa y contestar a todas las llamadas a partir de entonces con el manos libres, así como leer cualquier mensaje que llegue.
El juego es divertido, al principio, porque a partir de entonces empiezan a salir secretos que la pantalla del móvil solo revela a su propietario, pero que ahora están al descubierto, y se lía parda en todos los sentidos. Malos comportamientos, o aficiones ocultas, orientación sexual, celos, vergüenza, engaño. Todos los personajes acaban dando y recibiendo y lo que podría haber sido una velada tranquila e insustancial, se convierte en un torbellino de emociones.
Las interpretaciones son buenas, porque la historia da para ello y como entretenimiento es una película que da lo que promete. El final es curioso y parece que no supieran cerrar de un mejor modo la historia, pero si tenemos solo en cuenta el camino hasta él, me conformo.
De esta película originalmente salió una obra de teatro, ya que da para ello al suceder toda la acción en un comedor, sin salir de él, e internacionalmente además de las obras de teatro, ya se ha vendido los derechos y realizado remakes en varios países, entre ellos España, con nada más y nada menos que Alex de la Iglesia, México o Grecia entre otros, deben ir ya por 8. Como era de esperar, al director de la italiana original no le ha gustado ninguno de ellos según ha declarado.