El cine es un arte, y como arte, no está establecido por normas. SÃ, existen las normas y se puede hacer una pelÃcula «de manual». Pero las normas dan resultados, y hay que conecerlas, pero no seguir ciertas normas nos dan otros resultados.
Cosas como el plano, contraplano, las tomas de corta duración, las elipses temporales,… son cosas que en ocasiones los autores no han necesitado para contar una historia. O lo han hecho a su manera.
Con la idea de iniciar una serie de pelÃculas curiosas en cuanto a como son contadas, hoy vamos a empezar con pelÃculas rodadas en un solo plano. Algo difÃcil pero muy natural y artÃstico.
En el teatro o en la fotografÃa hay limitaciones espaciales, temporales que el cine puede saltarse facilmente, pero el poder hacerlo no es sinónimo de querer hacerlo y cuando nos presentan obras rodadas de forma distinta, como un solo plano, su frescura y su diferencia suele ser ya de por si un punto a favor.
Vamos a ver algunas de las más conocidas o que he podido recopilar, pero se admiten sugerencias para ampliar la lista en los comentarios o nuestras redes sociales.
1917 (Sam Mendes, 2019)
La más reciente, quizás la menos extraña de la lista y no la más laureada y eso que ganó 3 Oscar.
Sam Mendes rueda un (casi) documental sobre la 2ª Guerra Mundial con la cámara siguiendo las aventuras en batalla de 2 soldados a los que se le ha asignado una misión. La supuesta toma única no es real, impensable con el despliegue realizado, pero dota a esta cinta de la emoción que busca.
Hablar (JoaquÃn Oristrell, 2015)
PelÃcula española de JoaquÃn Oristrell, guionista, sobre todo, pero también excelente director. De ambas cosas es de lo que ejerció en este caso rodando 80 minutos en el madrileño barrio de Lavapiés. 20 historias en lo que casi es una obra teatral con los sentimientos y las palabras tan protagonistas como los propios intérpretes. Cine experimental con un buen resultado.
Birdman o la Inesperada Virtud de la Ignorancia (Alejandro G. Iñárritu, 2014)
Muy reciente también, y ya os hablamos de ella por partida doble. Marciana pelÃcula sobre la vida de un actor. En este caso la acción transcurre en varios dÃas y en varios lugares. El falso plano secuencia va empalmando los dÃas, la acción y los personajes en una obra visual, con mucho diálogo, personajes interesantes y una dirección del mexicano Alejandro González Iñárritu que le valió para ganar 4 Oscars: pelÃcula, dirección, guión y fotografÃa.
La Soga (Alfred Hitchcock, 1948)
Un clásico del que muchos han oÃdo hablar, pero seguro que menos son los que la han visto. También el mago del suspense, Alfred Hitchcock, hizo una pelÃcula no tan convencional para la época como esta, su primera pelÃcula en color, además. Con el crimen perfecto como telón de fondo, a una fiesta en la casa de unos estudiantes llega un famoso criminólogo, lo que servirá para poner a los comensales de los nervios.
Timecode (Mike Figgis, 2000)
Otra pelÃcula experimental en el amplio sentido de la palabra. La acción transcurre en las 4 secciones en las que se divide la pantalla en esta pelÃcula. Hora y media de cuatro historias en una misma pantalla, con la única licencia de la subida de volumen en algunos de los momentos para priorizar alguna de las secciones. Tan extraño como suena y con buen reparto, y no tan malos resultados de cara a la crÃtica, que siempre agradece cosas nuevas. No asà el público.
Empire (Andy Warhol, 1964)
Todo el mundo conoce a Andy Warhol, como artista.
Todo el mundo conoce el Empire State Building, como edificio.
Cuando ambos se juntan, solo a Warhol se le puede ocurrir grabar una pelÃcula/documental/toma del Empire State Building, sin más, durante 8 horas.
Una de las pelÃculas más comentadas y menos vistas de Andy Warhol, y casi dirÃa de la historia, por razones obvias.
Lo considero más una obra de arte que una pelÃcula o documental, pero el plano único que buscamos, lo tiene.
Utoya, 22 de Julio (Erik Poppe, 2018)
Quizás la pelÃcula no sea tan conocida, al tratarse de una producción noruega, pero sà los hechos.
En el verano de 2011 un neonazi, tras realizar un atentado en Oslo, apareció en esta pequeña isla tiroteando a los jóvenes que formaban parte de un campamento. El tiempo real y el plano secuencia da a la pelÃcula una mayor sensación de realidad, siguiendo como lo vive una de las jóvenes implicadas.
Victoria (Sebastian Schipper, 2015)
La frase de la promoción de la pelÃcula lo dice todo: una ciudad, una noche, una toma (real).
La ciudad es BerlÃn y la chica una joven española y sus correrÃas durante esa noche por la ciudad.
Muy alabada por la crÃtica y con un espectacular recorrido festivalero que le hizo ganar varios premios importantes.
La Casa Muda (Gustavo Hernández, 2010)
Otra frase promocional contundente: terror real en tiempo real. PelÃcula uruguaya de terror basada supuestamente en hechos reales con casa encantada incluida. También el cine de género tiene cabida en esta lista.
Curiosidad: en 2011 se hizo su remake USA con otra pelÃcula también realizada en un solo y también falso plano: La Casa Silenciosa.
Running Time (Josh Becker, 1997)
Un actor de culto como Bruce Campbell interpreta a un exconvicto que intenta ejecutar el atraco perfecto.
Rodada en blanco y negro, con La Soga de Hitchcock como claro referente, esta cinta independiente está rodada con un falso plano secuencia y plantea una acción en tiempo real.
El Arca Rusa (Alesandr Sokurov, 2002)
Otra pelÃcula festivalera aclamada por la crÃtica. Un aristócrata francés del siglo XIX paseando por el Museo Hermitage de San Petersburgo. Según su propia publicidad: 300 años de la historia de Rusia, 33 habitaciones del museo Hermitage y 3 orquestas tocando en directo en un único plano.
Lost in London (Woody Harrelson, 2017)
El más difÃcil todavÃa.
Anunciada como la primera pelÃcula en directo de la historia. Rodada con una sola cámara y en un solo plano, fue estrenada en directo en varios cines de Londres mientras se rodaba.
Supuso el debut (y única pelÃcula) en la dirección y guión de Woody Harrelson, que además es el protagonista.
Irreversible (Gaspar Noé, 2002)
Realista, desquiciante, perturbadora, pero muy muy bien hecha.
La historia se cuenta al revés y se compone de 13 planos secuencia encadenados.
Una pelÃcula para verla sin palomitas, si no quieres que vuelvan a salir por donde han entrado.
Gaspar Noé se luce, al igual que Cassell y Bellucci que están a tope.
Extra
El Colapso (Serie, 2019)
No es una pelÃcula sino una serie, y cada uno de sus episodios está rodado como una única toma.
Frenética, perturbadora y ¿profética?